Si has visitado Roma, la zona histórica, el centro de Roma, seguro que te ha sido fácil moverte entre calles y monumentos. Roma es una ciudad prácticamente llana que se deja caminar muy bien. Y digo ‘prácticamente’, porque no toda es un plato. Si recuerdas aquello de que Roma tiene siete colinas, estarás conmigo de que hay algunos lugares que descuellan en altura. No muchos, no muy altos, no muy grandes, pero existir, existen.
Roma tiene un atractivo patrimonio arquitectónico aupado sobre unas lomas, sobre siete colinas, que merecen también el interés del viajero. Dependiendo del gusto de cada cual, algunas resultan hasta pequeñas joyas de la arquitectura antigua que hay que descubrir. Me gustaría contarte qué es lo que puedes ver en cada una de esas siete colinas, y luego ya ves si las incluyes en un tour en Roma, en tu próximo viaje a Roma ¿Me sigues? Vamos primero a subirnos al Campidoglio.
–Colina del Capitolio. El Capitolio (Campidoglio, en italiano) está situada delante de la Colina del Palatino.Siempre ha sido el centro administrativo de Roma. En la Colina del Capitolio puedes ver el Palazzo Senatorio, que nada tiene que ver con ningún senado, sino que es el edificio del Ayuntamiento de Roma, aunque, sí, fue sede del romano antiguo. También puedes ver dos palacios soberbios, los de los Museos Capitolinos, que se extienden en una plaza renacentista diseñada por Miguel Ángel. En el centro de la plaza podrás ver una estatua ecuestre del emperador Marco Aurelio que no es la original.
Miguel Ángel es también autor de la escalinata que permite acceder a la cima de la Colina del Capitolio. Por cierto, en Roma la llaman -a la escalera- ‘La Cordonata’. Busca al final de la escalera dos estatuas romanas, las de Cástor y Pólux. Una cosa más, en la explanada merece la pena ver la Iglesia de Santa Maria in Aracoeli. Desde el Capitolio tendrás una vista fabulosa y de pájaro del Foro de Roma y de los Foros Imperiales.
– Colina del Palatino. El Palatino (Palatina, en italiano) está situada entre el Circo Máximo y el Foro de Roma. La leyenda dice que fue en esta colina donde Luperca, una loba solitaria, amamantó a Rómulo y a Remo, fundadores de Roma. Precisamente en tiempos de los romanos, el lugar fue un espacio sagrado en el que se levantaba el recinto de la Triada Palatina, hogar de culto para Júpiter, su mujer Juno y la hija de ambos, Minerva.
Otra leyenda dice que el templo fue fundado por el rey latino Tarquinio Prisco y era considerado el más importante de Roma. Fue uno de los pocos templos que se salvaron de la destrucción de los galos cuando arrasaron la ciudad de Roma en el 390 aC. La Colina del Palatino fue también un espacio residencial de alto standing, diríamos hoy. Allí levantaron residencias los emperadores, Tiberio, Augusto, Calígula y Nerón. Tres lugares que visitar en la Colina del Palatino, la Domus Flavia, la Casa de Livia y el jardín renacentista del Orti Farnesiana.
– Colina del Esquilino. El Esquilino está más arriba del Coliseo. Allí podrás ver la Domus Aurea de Nerón, el Foro de Trajano y, en la parte norte de la elevación, la Basílica de Santa María La Mayor, además de la Estación Roma Termini. Algunas familias originarias de esta loma se autoimpusieron Esquilino como apellido para remarcar su procedencia.
– Colina Aventina. El Aventino es la colina situada más al sur y se la puede ver rodeada por el río Tíber. Allí podrás ver la Iglesia de Santa Sabina, la sede o residencia de la Orden de los Caballeros de Malta y el popular Parque Savelli.
– Colina de Celio. La Colina de Celio, que viene de Mons Caelius, se halla delante de la del Palatino, al sur de la zona del Coliseo. En la colina podrás descubrir las iglesias de San Gregorio Magno, la de Santi Giovanni e Paolo, la de Santa Maria in Dominica y la de Santo Stefano Rotondo, además de la Villa Celimontana .
– Colina de Viminal. El Viminal (Viminale, en italiano) es la más diminuta de las site colinas de Roma. Tiene a la del Quirinal al noreste y la del Esquilino al sudeste. En la elevación se sitúa el conjunto del Ministerio del Interior italiano, al que también se le conoce como ‘El Viminal’, y el Teatro de la Ópera de Roma. La estación ferroviaria de Roma Termini tampoco está lejos.
– Colina del Quirinal. El Quirinal (Quirinale, en italiano) es la colina que está situada más al norte. Debe su nombre a un templo antiguo dedicado en tiempos de los romanos al dios Quirino. Allí se pueden ver los restos de las Termas de Diocleciano y Constantino, además de los Jardines de Salustio. Seguramente te sonará el nombre por el del Palacio del Quirinal que está allí y es la residencia del presidente de la República italiana. El palacio es una ampliación de una villa anterior, la Villa de Hipólito de Este, que el papa Gregorio XIII transformó en el Palacio del Quirinal.
Ya ves lo que te ofrecen las colinas de Roma. Para echarte una mano y descubrir todo ese patrimonio en lo alto, y nunca mejor dicho, te propongo la opción de los visitas guiadas del portal Viajararoma.com. Echa un vistazo a sus tours en Roma en este enlace: http://www.viajararoma.com/entretenimiento-en-roma/.
7 colinas de Roma, 7 razones para visitar Roma.
Recursos para el Viaje:
Hoteles: http://www.guias.travel/ver/?city/it/rome.es.html
Vuelos: http://www.guias.travel/vuelos/
Tours y Actividades para hacer en Roma: http://www.guias.travel/ver-tours/?Roma/d511-ttd
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