El Palacio Real de Ámsterdam es el edificio no religioso antiguo más grande de Europa. Durante toda su historia, desde su construcción en la segunda mitad del siglo XVII, ha sido utilizado para infinidad de servicios. Se trata de un conjunto que no te puedes perder si quieres conocer lo mejor de Ámsterdam.
El diseño del conjunto se debe a la mano del arquitecto holandés Jacob van Campen. Originariamente, la construcción era de una reluciente piedra blanca, pero la acción de la intemperie le ha dado una pátina gris amarronada característica. En un principio, el Palacio Real de Ámsterdam fue dedicado a ser sede de la magistratura municipal. Su primer ala completa se abrió al público en 1655.
Tras su construcción, un largo tropel de escultores y pintores fueron contratados para crear obras con las que decorar los interiores del edificio. Así, no es raro encontrar obras maestras de pintores de la talla de Rembrandt. Se decía entonces que los temas de las decoraciones buscaban reflejar el poder de la ciudad de Ámsterdam y el de la misma república holandesa.
Palacio real
La primera ocasión en la que el conjunto se convirtió en palacio real fue en 1800, cuando Luis Napoleón, hermano del famoso emperador, fue designado como gobernador de Holanda. Luis Napoleón realizó trabajos para reconvertir el edificio en un definitivo palacio. El gobernador de Holanda decoró los interiores en estilo Imperio y añadió muebles que hoy hacen la delicia de los visitantes. Muchas piezas de mobiliario siguen en su lugar y son originales.
Cuando Napoleón Bonaparte cayó en 1813, el Palacio Real de Ámsterdam fue devuelto a la ciudad, aunque no por mucho tiempo. El rey Guillermo I de Holanda quedó prendado por la construcción y lo siguió usando como palacio real. Y fue así hasta 1936, en que el conjunto pasó a convertirse en edificio público. En la actualidad, el Palacio Real de Ámsterdam está a disposición de la reina y para las funciones de Estado, especialmente para ceremonias oficiales.
El Palacio Real de Ámsterdam puede ser visitado por cualquier persona en tours guiados con los que se accede a un número determinado de salas. Las visitas son muy sugerentes en tanto que los guías desgranan muchas anécdotas e historias curiosas que son el reflejo de la larga y azarosa vida de un edificio tan cargado de historia.
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