Nuestro guía les recogerá en el hotel o apartamento en Barcelona, con un vehículo privado, con el que se desplazarán a la gran Tarraco, para rememorar la época donde gladiadores, centuriones y emperadores escribían la mítica y sangrienta historia del Imperio Romano.
Visitar Tarragona es trasladarse a los tiempos de la Roma Imperial. Tarragona fue la capital de la antigua Hispania Citerior, o sea que tuvo un papel muy relevante por ser una de las dos provincias que conformaban la Península Ibérica hace aproximadamente dos mil años.
Tarragona está ubicada a 100 km al sur de Barcelona, en la Costa Dorada, una zona privilegiada donde disfrutan de un clima excelente, playas de arena fina y aguas cristalinas.
Esta bonita ciudad mediterránea alberga uno de los conjuntos arqueológicos romanos más importantes y mejor conservados de España, siendo declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 2000.
Con el guía especializado nos adentraremos en este histórico escenario. Nuestra primera parada será en para admirar el Acueducto de les Ferreres, también llamado ‘Pont del Diable’ (puente del diablo). Tiene una longitud de 217 m y una altura de 26 m, se trata de una impresionante estructura al tiempo que un espectacular ejemplo de la avanzada ingeniería romana. Esta será una antesala de lo que seguidamente podremos disfrutar.
A continuación entraremos en Tarragona. Primero realizaremos un tour a pie en el que tendrán la posibilidad de descubrir los interesantes restos, que se conservan de aquella civilización, mientras nuestro guía les relata apasionantes historias y leyendas.
Recorreremos las gruesas Murallas, que defendían esta gran ciudad. Pasaremos a través de sus imponentes puertas de acceso. Después nos adentrarse en uno de los Circos mejor conservados de Occidente. Una maravilla medio oculta bajo las estructuras de los edificios del siglo XIX. Podrán comprobar como conviven las huellas del antiguo Foro Romano con la medieval y moderna Tarragona. Es curioso observar como esta parte de la ciudad sigue siendo, después de pasados 2000 años, el centro de actividad de esta histórica ciudad.
Finalmente, nos sorprenderán las fantásticas ruinas del Anfiteatro, ubicado a orillas del Mediterráneo desde el siglo II, donde se celebraban las sangrientas luchas entre gladiadores y feroces animales. Cerrando los ojos, podemos imaginar este impresionante escenario en el pleno bullicio de la contienda.
Debido a la situación privilegiada de este núcleo de población romana, Tarraco fue un importante emplazamiento, que facilitaba la salida al mar Mediterráneo, el comercio, las comunicaciones y otros muchos aspectos que la hizo importante próspera para el imperio que allí se asentó.
Finalizaremos nuestra visita a Tarragona en el llamado Balcón del Mediterráneo, un mirador desde donde disfrutarán de las más hermosas vistas a la playa y el mar Mediterráneo, paisaje de fondo de una localidad llena de historia y belleza.
Este tour se puede realizar en grupo privado.