Cuando pensamos en viajar a nuestro país vecino Francia nos viene inmediatamente a la cabeza su imponente y atractiva capital, que sin duda es uno de los lugares más visitados del mundo. Sin embargo, el país galo esconde un sinfín de lugares preciosos repartidos por toda su geografía, de norte a sur y de este a oeste.
Seguramente habréis oído hablar de Fontainebleau, ciudad francesa ubicada a unos 70 km al sur de la capital, y sobre todo de su espectacular palacio. El Palacio de Fontainebleau nos acerca una excepcional presentación de la historia, la historia del arte y la arquitectura francesa a través de sus más de 1500 habitaciones y de sus 130 hectáreas de zonas verdes y jardines. Por este motivo y por su gran belleza el Palacio y sus jardines forman parte del Patrimonio Mundial de la Unesco desde 1981.