El río Támesis es uno de los atractivos principales de la ciudad de Londres. Forma parte de su naturaleza. La ciudad nació en una planicie regada por el río y vivió conectada con sus aguas. Sus puentes más que saltar el río lo abrazan, uniendo distritos y entrelazando el callejero.
Londres es una ciudad llena de contrastes. Tenemos un Londres estereotipado, clásico, típico, como cualquier ciudad europea con tradición; pero también podemos disfrutar de una ciudad por sus oportunidades de ocio, por los eventos que se darán cita, los periódicos o los extraordinarios, una ciudad para vivirla siguiendo el hilo argumental que guía nuestros gustos más personales.
Sólo hay que investigar un poco para dar con la medida de Londres a nuestra talla. Lo mismo se puede decir de los gustos por los lugares en los que alojarse cuando se viaja fuera.