Venecia es para todo el mundo agua y canales. Una combinación un tanto peculiar que hace más increíble su patrimonio artístico y arquitectónico. Bueno, tendría que decir, por tanto: Agua, canales y arte. Sí, así se retrata mejor Venecia.
La bella Venecia goza de un notable patrimonio artístico y arquitectónico dignos de admirar, entre obras de siglos de historia y muchas corrientes artísticas diferentes. En algunos de los principales monumentos de la ciudad hallamos dichos estilos, como en la Basílica de San Marcos (de estilo véneto-bizantino) o el Palacio Ducal (la obra maestra del gótico veneciano), entre otras muchas otras obras de arte.
Venecia, Murano, Burano, o el Lido de Venecia pueden convertirse en los meses de verano en espacios algo masificados como consecuencia del torrente de turistas organizados que llegan para verlos. Sin embargo, se puede estar en Venecia, o prácticamente casi, y disfrutar en esas mismas fechas centrales del estío de una tranquilidad monacal a toda prueba. Te lo aseguro. Pero ¿dónde?
En Torcello, una isla también casi, casi deshabitada, de la laguna veneciana y del entorno de la Ciudad de los Canales. De las 120 que hay en la laguna véneta. Estarás en Venecia y lo notarás, pero tampoco lo notarás ¿no sé si me entiendes? Será algo así como una paz veneciana a prueba de susurros ¿Y qué es Torcello? ¿qué puedes ver en ella? ¿cómo se puede disfrutar de su paz?