El Canal de Saint Martin es una infraestructura pública que conocen muy pocos visitantes de París. Se trata de un canal de agua que tiene una longitud total de 4,55 kilómetros que discurre por los distritos X y XII. Merece la pena que lo descubras en tu próxima visita a París.
Casi la mitad de su recorrido es subterráneo. El sistema tiene nueve exclusas y dos puentes giratorios. Las exclusas permiten salvar un desnivel de agua apreciable de 25 metros. El conjunto está protegido como monumento histórico francés desde 1993.
Durante los siglos del Antiguo Régimen, París tenía problemas muy serios para recibir agua de abasto público. En aquellos tiempos, el agua no era sólo escasa, sino también de muy mala calidad. Todo, con la ayuda de conducciones de agua sobre acueductos y con la provisión de caudales provenientes de pozos.
Napoleón
Sin embargo, para finales del siglo XVIII la situación se había hecho insostenible. Así, Napoleón se vio obligado a resolver de una vez por todas el problema del agua en París. En 1802, se creó una canalización llevando agua del río Ourcq.
Pero Napoleón no llegó a verlo. La obra tardó en terminarse 23 años y sólo entró en uso en 1825. El nuevo canal mejoró el saneamiento, permitió el desplazamiento de mercancías porque era navegable y dio más trabajo a las lavanderas de París.
El Canal de Saint Martin tuvo un gran desarrollo y aprovechamiento durante casi todo el siglo XIX y más o menos hasta mediados del siglo XX. Sin embargo, en la década de 1960 empezó a languidecer como medio de transporte fluvial y a principios de la década siguiente incluso estuvo a punto de desaparecer suplantado por una autovía urbana de cuatro carriles.
El proyecto urbanístico finalmente no se llevó a cabo y esta gran obra de ingeniería de París pudo conservarse para disfrutarse hoy como una de las infraestructuras decimonónicas de uso público más importantes de la ciudad.
Hoy, el Canal de Saint Martin es una vía fluvial con un aprovechamiento turístico, aunque aún sigue transportando mercancías ocasionalmente.
El Canal de Saint Martin está abierto al tráfico casi todo el año, exactamente 363 días, y sus vías laterales son lugares de paseo para los parisinos que gustan de disfrutar del lado verde de París, se puede decir que sin salir de casa.
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