Desde que abriera sus puertas hace un siglo largo, el Mouling Rouge es una referencia para los cabarets más famosos del mundo. No sé si su ambiente ya no es de este mundo. Para juzgarlo, apúntate a una de sus funciones ¿cómo lo ves?.

Pero todo tiene un comienzo, en 1889, en París era muy comentada la inauguración de una nueva sala de conciertos. Los propietarios del establecimiento, Joseph Oller y Charles Zidler, eligireron el nombre de Moulin Rouge con un título cargado de pretensiones: ‘El Primer Palacio de las Mujeres’. Sus dueños aseguraban entonces que iba a convertirse en ‘un templo de la música y de la danza’.

Pasó poco tiempo antes de que el Moulin Rouge se convirtiera en un escenario con la reputación de exhibir a chicas jóvenes contorneándose con la misma flexiblidad que su moral. El baile del can-can ya se conocía de salones de la misma especie desde la década de 1830. En los primeros años del Moulin Rouge, el can-can era poco más que un baile subido de tono para entretener a la clientela masculina.

A veces los números del Moulin Rouge eran realmente vulgares y fue frecuente que causaran indignación en la opinión pública parisina. Durante este periodo, el pintor Henri de Toulouse-Lautrec fue uno de sus más notables clientes. Para el artista, el Moulin Rouge fue una auténtica inspiración tal y como revelan sus famosas escenas.

Reputación al alza

En las décadas que siguieron, el Moulin Rouge mejoró su reputación de burdel para convertirse en una sala de música de moda conocida por sus espectáculos extravagantes de cabaret al que acudía una clientela de clase alta.

El baile del can-can, no obstante, se mantuvo en el repertorio aunque más bien como un baile de aires traviesos. Ver la escenografía del can-can en directo, con sus movimientos, pasos, acrobacias y patadas al aire acompasadas, sigue siendo uno de los atractivos más llamativos de la casa como atracción turística.

El Mouling Rouge no ha perdido su popularidad como atracción adulta en París. Nunca faltan tropeles de turistas tomando foto del enorme molino de viento rojo que es la imagen de la casa y que se alza sobre la fachada.

Para programar una visita al Moulin Rouge, los niños, mejor, en casa. Si quieres descubrir el Moulin Rouge, lo mejor es utilizar los recursos que te ofrece el portal Viajaraparis.com, donde podrás encontrar excursiones de un solo día en los alrededores de París y mucho más. Pica en el enlace: www.viajaraparis.com

Moulin Rouge.
Moulin Rouge.
Autor

Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Autónoma de Barcelona. Periodista, redactor, comunity manager e informador gráfico, residente en Las Palmas de Gran Canaria, y colaborador en diferentes medios locales de las Islas Canarias y españoles.

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