Gran Bretaña tiene notables construcciones antiguas que lo dan todo por romper moldes, sobre esa idea prefijada que tenemos de la arquitectura que figura en los libros de historia.

Una de esas construcciones divergentes es la del Royal Crescent de Bath, la Media Luna Real de Bath. Una larga estructura formada por 30 viviendas adosadas que adoptan una curiosa forma de media luna que fue construida entre 1767 y 1774.

Se trata de uno de los mayores y mejores ejemplos de arquitectura georgiana del Reino Unido que levantó con un diseño original el arquitecto John Wood El Joven. Aunque se han hecho muchos cambios en sus interiores, la fachada sigue intacta, tal y como fue concebida en el siglo XVIII. La construcción es un atractivo turístico con esa plástica curva tan peculiar, por algo ha sido elegida con mucha frecuencia para formar parte de escenarios de películas y de producciones televisivas. El Royal Crescent tiene una estampa que cautiva.

Si te he de ser sincero, lo de media luna si está justificado, la forma es evidente, pero lo de real, le viene de refilón, todo porque a finales del siglo XVIII residió temporalmente en el edificio Frederick de York (1763-1823), hijo del rey Jorge III y aspirante nunca confirmado en el trono. Sólo por éso.

Diseño

John Wood diseñó la gran fachada curva con columnas jónicas hasta sumar un total de 114, todas de 76 centímetros de diámetro más de catorce metros de altura y sobre un entablamento de 1,5 metros.

Una nota curiosa. Cada comprador de viviendas original adquirió un tramo de la fachada según su criterio y, tras ella, adaptó el espacio disponible según sus necesidades. Esta forma tan peculiar de edificar se ve con toda claridad cuando se circula por la parte de detrás de la fachada y se descubre la mezcolanza arquitectónica resultante. Un caos.

Frente al Royal Crescent se puede observar un terraplén con la parte exterior inclinada cubierta de césped. El objetivo de ese desnivel fue eliminar terreno y adaptarlo para favorecer la vista de todo el conjunto desde cualquier punto de vista. No se sabe si es contemporáneo de la construcción, pero originalmente era más profundo.

Residentes

En el siglo XVIII vivieron en el Royal Crescent Henry Sandford, un diputado irlandés jubilado, también el escritor Christopher Anstey, Jean Baptiste, vizconde du Barre, jugador empedernido que murió en un duelo entre caballeros y está enterrado en una iglesia de Bath, también Phillip Thicknesse, un soldado de fortuna, y Thomas Linley, un profesor de canto de cierta fama en Inglaterra.

En el siglo XIX vivieron entre sus muros el reformador electoral Francis Burdett y su hija, Angela Burdett-Coutts, primera baronesa Burdett-Coutts, también el almirante retirado William Hargood, el jurista y explorador Edward Bulwer-Lytton, primer barón Lytton. Isaac Pitman, inventor del sistema más popular de taquigrafía, el de la Taquigrafía Pitman, fue residente de la Media Luna de Bath.

Ya en el siglo XX, en 1921, el arquitecto Robert Tor Russell se fijó en la Media Luna como fuente de inspiración para diseñar el distrito central de negocios de la nueva ciudad de Nueva Delhi en India. Durante la Segunda Guerra Mundial cayeron algunas bombas sobre la Media Luna de Bath, el más grave las voladuras de las viviendas 2 y 17.

Una curiosidad. En la década de 1970, la vivienda número 22, la de la señorita Wellesley-Colley, fue pintada de amarillo, contra el tradicional blanco de toda la vida. El Ayuntamiento de Bath conminó a la propietaria para que cambiara el color, pero el caso llegó a los tribunales. Finalmente, la Secretaría de Estado de Medio Ambiente declaró que la puerta podía quedarse como estaba, amarilla. En cambio, otras propuestas para iluminar el edificio con focos o instalar una piscina han sido desestimadas.

Estado actual

Las viviendas del Royal Crescent son una mezcla de estilos curiosa. Muchos de los pisos son de propiedad privada, pero una minoría son propiedad de una asociación. En el número 1 de Royal Crescent hay instalado un museo histórico sitio que está sostenido por la asociación, la Bath Preservation Trust con el que se quiere hacer honor a los valores del conjunto arquitectónico. La entidad ha intentado devolver algunas construcciones a su estado original.

En 1950, la vivienda número 16 se convirtió en casa de huéspedes y en 1971 se unió a la 15 para formar un hotel, el Royal Crescent Hotel que en 2012 fue comprado por el Grupo Topland. No lejos del Royal Crescent Hotel, en el Royal Victoria Park, cada verano se suelen lanzar globos aerostáticos, bien por la mañana muy temprano o a última hora del día.

¿Te animas a visitar Bath? Sí, a descubrir este monumento original. Tienes información disponible en el portal Viajaralondres.com, donde podrás hallar referencias a excursiones de un solo día en los alrededores de Londres que incluyen a Bath. Sigue esta dirección web y verás:

http://www.viajaralondres.com/ciudades-para-visitar-cercanas-a-londres/bath/

Royal Crescent de Bath.
Royal Crescent de Bath.
Autor

Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Autónoma de Barcelona. Periodista, redactor, comunity manager e informador gráfico, residente en Las Palmas de Gran Canaria, y colaborador en diferentes medios locales de las Islas Canarias y españoles.

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